sábado, 5 de marzo de 2016

La reina


Siempre perfecta...pero siempre envarada, artificial, con los brazos poco naturales,  hacia atrás, para tener la espalda recta, tiesa,  como si se hubiese tragado una escoba, como una muñeca de porcelana distante. Parece no permitirse un descuido, por pequeño que sea, obsesivamente. Es guapa, o a mí me lo parece, aunque me gustaba más antes, cuando salía en el Telediarío, sin tanto retoque, más humana. Alguien debería ayudarla a que no tuviera tanto miedo a no ser perfecta, a quitarle la ansiedad.